“La expropiación estaba encaminada hasta que Scioli vino a festejar su cumpleaños en el Hermitage”


MAR DEL PLATA –
Luego de que el bloque de concejales de Acción Marplatense autorizara al intendente Pulti a comprar con sobreprecio un predio lindero al viejo basural, propiedad del empresario Aldrey Iglesias; la ex diputada provincial Julia García, autora del proyecto de ley de expropiación de esas tierras, subrayó la necesidad de que la Justicia determine “si se está haciendo lo correcto”.
La ex diputada provincial Julia García, promotora de un proyecto de ley presentado en la Legislatura bonaerense con el objetivo expropiar 15 hectáreas linderas al predio de disposición final, propiedad de Aldrey Iglesias, cuestionó la decisión del gobierno municipal de comprar en forma directa el mismo espacio con un presunto sobreprecio del 60%.
Según dijo este martes, su iniciativa había sido apoyada por “varios bloques minoritarios”, hecho que permitió que la Comisión de Tasación provincial estipulara el valor del terreno en 998 mil pesos. Casualmente, advirtió, “en ese entonces también se pedían 1.600.000 de pesos” por ese lugar. “Es decir, para mí, más allá de ser una realidad, esa suma es un capricho”, razonó.
Sin embargo, aseguró, el expediente “quedó en la nada” debido a la “relación de amistad (de Iglesias) con Scioli, que nos ha traído muchos dolores de cabeza y tristeza porque, siendo uno de los deudores más grande que tenía la provincia de Buenos Aires, le fue adjudicado el hotel Provincial, con una eximisión de impuestos de 10 años”.
“El expediente venía encaminado hasta que Scioli vino a festejar su cumpleaños en el Hotel Hermitage”, cuyo propietario es Florencio Aldrey Iglesias, enfatizó.
Para García, la vía de la expropiación “permitía que hubiera transparencia” en el proceso y que “se supiera realmente cuánto vale esa tierra”.
En ese marco, admitió: “Como autora del proyecto y teniendo en cuenta este antecedente, me gustaría presentarme en la Justicia para ver si esto que se está haciendo es realmente lo correcto”.
Y aseveró: “El Tribunal de Cuentas es muy riguroso en estas cuestiones y yo creo que si accede a la tasación formal de la municipalidad e informal de la provincia de Buenos Aires, tiene que ver que aquí hay un sobreprecio que no sabemos porqué motivo se quiere pagar”.