Diputados y senadores recibirán a las víctimas de Cariglino
Los vecinos podrán expresar denuncias por hechos de violencia política y mala praxis. Ya se registraron tres muertes sospechosas en el Hospital “Claudio Zin” y el asesinato del enfermero Walter Navarro.
Las comisiones de Salud Pública y de Derechos Humanos de la Legislatura bonaerense sesionarán el próximo martes, desde las 11, en la localidad de Malvinas Argentinas, donde existen varias denuncias por casos de mala praxis y las patotas del intendente Jesús Cariglino hostigan a familiares y periodistas que hacen públicas las irregularidades en el distrito.
La convocatoria a participar del plenario de comisiones, que se realizará en Av. Presidente Perón y Av. Baroni, fue impulsada por los senadores Marcelo Carignani y Santiago Carreras, y las diputadas Viviana Nocito y Fernanda Raverta.
Las organizaciones de familiares de víctimas de mala praxis y los organismos de Derechos Humanos locales se plegarán a la iniciativa bajo la consigna «Ni un muerto más en Malvinas Argentinas» y llaman a los vecinos a expresar «en forma oral o escrita» denuncias por hechos de violencia política y mala praxis.
En el distrito gobernador por Cariglino ya se registraron tres muertes sospechosas en el Hospital “Claudio Zin” en 2004, 2009 y 2012.
El último caso fue el de Melani, la niña que falleció meses atrás al medio año de vida como consecuencia de una inadecuada atención médica. Su madre, Claudia Ledesma, llegó a enfrentar cara a cara al intendente durante la fallida reconstrucción judicial del ataque a los periodistas que investigaban los casos de mala praxis en el centro de salud.
En esa reconstrucción, que fue impedida por Cariglino el pasado 4 de septiembre, había participado el enfermero Walter Navarro, quien fue asesinado horas después en la puerta de su casa.
Días atrás, otro enfermero de Malvinas Argentinas se animó a romper el silencio y denunció ante la Justicia las irregularidades del sistema sanitario municipal. Habló de maltratos y discriminación a los pacientes, falsificación de historias clínicas, abandono de personas, sustitución de medicamentos por placebos, estafas al PAMI, entre otras.
Tras el asesinato de su colega su identidad se mantiene en reserva. «No quiero terminar como el enfermero que mataron, como Walter Navarro», fundamentó el testigo.