Confirman el primer caso autóctono de viruela de mono es bonaerense

Se trata de un paciente de 22 años que encendió las alarmas sanitarias de toda la región, para identificar las vías de contacto.

En las últimas horas se confirmó el primer caso autóctono de viruela del mono, detectado en la localidad bonaerense de San Isidro, lo que encendió las alertas sanitarias en toda la región, ya que por primera vez desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia internacional por el brote de esta enfermedad, se detectó un caso que no tiene relación con viejas al continente africano.

El paciente es un joven de 22 años que no tiene antecedentes de viaje reciente a zonas endémicas ni contacto con personas que hayan estado en dichas áreas, lo que indica que la transmisión del virus se produjo dentro del territorio argentino. El diagnóstico fue realizado en el Hospital de Boulogne, donde el paciente acudió presentando fiebre, erupciones cutáneas y dolor muscular, síntomas compatibles con la viruela del mono. Las muestras enviadas al Instituto Malbrán confirmaron la presencia del virus mpox, clado IIb, en menos de 24 horas.

Este es el primer caso de transmisión local, un hecho que ha encendido las alarmas entre las autoridades sanitarias. Hasta ahora, todos los casos reportados en el país estaban asociados con personas que habían viajado al extranjero o mantenido contacto con viajeros infectados. Desde que se detectó el primer caso en mayo de 2022, Argentina ha registrado un total de 1.158 casos de viruela del mono, con dos fallecidos. Este nuevo caso en San Isidro eleva a diez el número de contagios registrados en 2024.

El paciente se encuentra actualmente en aislamiento en su domicilio, y permanecerá bajo cuarentena hasta que las lesiones cutáneas características de la enfermedad se curen por completo, un proceso que podría durar varias semanas. Mientras tanto, las autoridades sanitarias han iniciado una investigación epidemiológica exhaustiva para identificar y controlar posibles contactos cercanos del paciente, con el objetivo de contener cualquier propagación adicional del virus.