«Me dijeron que ni los derechos humanos ni la Presidenta me iban a salvar»

Alfonso Severo, testigo del caso Ferreyra, dio detalles de su secuestro al declarar hoy viernes  ante la Justicia. Dijo que dos hombres lo mantuvieron cautivo en una furgoneta hasta que el jueves a la noche lo liberaron en Gerli. Ratificó que fue golpeado y maniatado con precintos de plástico.

Severo declaró durante unas cinco horas el Juzgado de Garantías N°9, a cargo del magistrado Luis Silvio Carzoglio, donde relató lo ocurrido durante su desaparición.

“Me dijeron que me dejara de joder con el ferrocarril, que no iba a volver” y “que ni los derechos humanos, ni la Presidenta me iban a salvar”, sostuvo en uno de los tramos de su declaración.

Severo detalló que estuvo secuestrado en una furgoneta, acostado boca abajo, maniatado y tapado con una frazada.

En su relato, ratificó que el miércoles por la noche dos hombres armados y encapuchados que iban en una moto le cruzaron el auto, se bajaron y lo obligaron a meterse en la camioneta. Allí lo golpearon y maniataron con precintos de plástico.

En ese vehículo pasó las 24 horas de cautiverio hasta que el jueves por la noche arrancaron y lo liberaron en Gerli, según agregó.

Severo salió de su domicilio esta mañana con custodia policial y se dirigió al Polo Judicial de Avellaneda, dependiente del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, ubicado en avenida Mitre al 2600 de esa ciudad bonaerense.

Tras su aparición, anoche, Severo fue trasladado al hospital Finochietto de Avellaneda, donde recibió el alta médica a las 0.30 luego de ser sometido a una serie de estudios.

El ministro de Justicia, Julio Alak, destacó hoy la importancia de la declaración pública del testigo, que tras su liberación denunció esta madrugada que su secuestro «estaba dirigido a la Presidenta de la Nación», Cristina Fernández de Kirchner.

«La aseveración que hizo Severo es para investigar porque se está denunciando un hecho gravísimo, porque denuncia que se está creando una suerte de situación institucional delicada para amedrentar a la Presidenta, al Gobierno y al Parlamento para que no avance en un acto decisivo como es dar por cumplido el proceso de desinversión que tiene que finalizar el 7 de diciembre», apuntó Alak.

En el marco de una conferencia de prensa en la que denunció una «maniobra» del grupo Clarín en la designación de un juez natural para que falle sobre la constitucionalidad de una cláusula de la Ley de Medios, Alak agradeció la declaración pública del testigo en el juicio que se lleva adelante por el homicidio del militante Mariano Ferreyra.

«Le agradezco a Severo la información que proporcionó en cuanto a que su secuestro podía ser una manera de amedrentar a la Presidenta, que se ha caracterizado siempre por su enorme valentía que le permitió llevar adelante un programa de transformación inédita en Argentina junto a Néstor Kirchner», señaló el ministro de Justicia.